Un divorcio, aunque sea de mutuo acuerdo, nunca es sencillo. La ruptura de pareja es una de las situaciones más complicadas en la vida de una persona desde el punto de vista emocional. Supone empezar una vida nueva y, aunque no hay nada que pueda borrar el dolor, existen una serie de consejos para sobrevivir a un divorcio que pueden resultar de gran ayuda.
En muchos casos, lo más complicado es aceptar la situación. A diferencia de la separación, el divorcio supone la ruptura del vínculo matrimonial. Por lo tanto, no hay marcha atrás. Hay que aprender a estar sin el otro y tomar la distancia y el tiempo necesarios. Es importante encontrar nuevas motivaciones y seguir adelante.
Seguro que muchos de tus amigos y familiares tratan de animarte y decirte que no llores. Sin embargo, tal y como explican los psicólogos, es un error. Debes expresar tus emociones, aunque sean negativas. De lo contrario, terminarán enquistándose en tu “yo interior” y produciéndote sensaciones desagradables. No se trata de eliminar las emociones negativas, sino de aprender a gestionarlas para fomentar tu capacidad de resiliencia y alcanzar el equilibrio mental.
Durante el proceso de divorcio, debes rodearte de personas que te apoyen. Por supuesto, debes cuidarte, y para ello hay una serie de pautas que pueden ayudarte: dormir lo suficiente, practicar ejercicio de manera regular y seguir una alimentación saludable y equilibrada. La meditación es excelente para el cuerpo y la mente ya que reduce el estrés, mejora la capacidad de concentración y la memoria, y equilibra la estabilidad emocional.
Los mejores consejos para resolver el divorcio
Es fundamental mantener al margen del divorcio a los hijos, tanto si son menores como mayores de edad. En ningún caso deben convertirse en el arma arrojadiza contra el otro progenitor porque esto puede tener un impacto psicológico muy negativo en ellos. Por supuesto, nunca hay que delegar en ellos la toma de decisiones esenciales. Se les puede preguntar con quién quieren vivir, pero la última decisión siempre deben tomarla los progenitores.
Para evitar conflictos, es mejor dejar aquellas cuestiones sobre las que los cónyuges no se ponen de acuerdo para el abogado. Hay que hacer todo lo posible por agilizar el trámite, ya que ralentizar la discusión sobre un determinado tema nunca es positivo.
Cada divorcio es un mundo, así que conviene evitar compararlo con el de otros familiares o amigos. El objetivo del abogado especializado en derecho de familia es elaborar un convenio regulador a medida, que se adapte a las circunstancias concretas.
Divorcio de mutuo acuerdo
Ya de por sí, el proceso de divorcio es complejo y supone un duro golpe emocional para las partes, así que es conveniente que los cónyuges hagan todo lo que esté en su mano para que las cosas sean lo más fáciles posibles. El divorcio de mutuo acuerdo siempre es preferible frente al divorcio contencioso.
Uno de los puntos clave en el divorcio de mutuo acuerdo es el convenio regulador. Se trata del documento que refleja el acuerdo entre los cónyuges sobre las medidas que van a regir la ruptura del vínculo matrimonial: uso de la vivienda familiar, reparto de los bienes en común, guarda y custodia de los hijos…
El hecho de que los cónyuges estén de acuerdo no implica que no deban contar con un abogado especializado en el derecho de familia. Es él quien debe redactar el convenio regulador y presentar la demanda de divorcio en el Juzgado correspondiente.
Por último, recuerda que en un divorcio no hay ganadores ni perdedores.