Este año, como ocurre cada Semana Santa, el Gobierno ha vuelto a aprobar el indulto de varios presos a petición de cofradías de toda España. Cinco reos -un tercio de los indultados hace diez años, en 2008- han salido de prisión gracias a una tradición tricentenaria que data del reinado de Carlos III, pero en declive ante las crecientes críticas que señalan la incompatibilidad de su motivación religiosa con un Estado moderno y aconfesional. ¿De dónde procede esta práctica? En Pluslegal Abogados te contamos la historia.
Corría el año 1759 cuando una epidemia de peste en Málaga obligó a suspender provisionalmente las procesiones de Semana Santa. Los reclusos de la prisión, que eran fervientes devotos, solicitaron sacar ellos mismos la imagen de “El Rico”, pero no se les concedió. Pese a ello, varios escaparon para llevar a hombros al Cristo por las calles de Málaga antes de volver por su propio pie a la cárcel. Este episodio coincidió con el repentino fin del brote de peste, por lo que se consideró un milagro que llevó al rey Carlos III a dictar una pragmática real en la que concedía a la malagueña Cofradía Nuestro Padre Jesús el Rico el privilegio de liberar, cada Semana Santa, a un preso sentenciado por un delito importante.
Desde entonces, muchas otras cofradías de España se han sumado a esta tradición -46 han solicitado indultos en los últimos cinco años-, aunque es la hermandad malagueña la que más indultos ha conseguido. De hecho, lleva 76 años consecutivos recibiendo el indulto que solicita. Esta práctica, sin embargo, se va apagando poco a poco. El número de perdones ha descendido año a año desde 2014, cuando se registraron 21, hasta los cinco de 2018.
Debate sobre una tradición religiosa en un Estado aconfesional
Uno de los motivos para ello es que cada vez surgen más voces críticas con esta tradición. Organizaciones como la Fundación Civio defienden que “la figura del indulto tiene que ser reformada a fondo, pero en el caso de las cofradías tiene el extra de que añade un elemento religioso que no tiene cabida en un Estado moderno y aconfesional con separación de poderes”. Para la asociación Europa Laica, los indultos como obra de misericordia suponen “una confusión entre lo civil y lo religioso”. Partidos políticos como Ciudadanos y Unidos Podemos han pedido recientemente al Gobierno, en la Comisión de Justicia, que suprima los indultos de Semana Santa, aunque al mismo tiempo reclaman que crezca el número de perdones a presos.
Los requisitos para los casos promovidos por las cofradías son, sin embargo, los ordinarios para cualquier indulto: que existan informes favorables del tribunal, el Ministerio Fiscal y el centro penitenciario y que concurran “razones de justicia, equidad o utilidad pública para su liberación”, tal como recoge la ley de 1870 -modificada por la Ley 1/1988- que rige el “derecho de gracia”. La concesión de los indultos compete al Rey, a propuesta del Ministro de Justicia y previa deliberación del Consejo de Ministros, que aprueba un Real Decreto que debe insertarse en el Boletín Oficial del Estado.